Sirena de mis noches fugitivas,
vuelve otra vez
a enredar en tu pelo
esta negra conciencia de que estoy de viaje
y que mi barca lleva prisa.
Miguel González Lomelí. Sirena
Para Laura Cayeros y amigas aficionadas a Starbucks
¡La sirena! ¡Lotería! Desde la infancia, la sirena es una figura familiar puesto que se encuentra en la lotería mexicana como una de las escasas representaciones de lo femenino. ¿De dónde viene la figura de la sirena? Se mencionan, por primera vez, en el canto XII de la Odisea como figuras femeninas de la seducción, por lo que Ulises, se hace atar al mástil del barco para no caer en la perdición de las canciones de las sirenas. En tanto, que por indicaciones de la maga Cirse ordenó a los marineros se taparan los oídos con cera: “Llegarás cerca de las sirenas, las que hechizan a todos los hombres que se acercan. A quienquiera que en su ignorancia llega hasta ellas y escucha su voz, a ese, no lo abrazará de nuevo su mujer ni sus hijos, contentos de su regreso a casa. Ahí las sirenas lo hechizan con un canto fascinante, situadas en un promontorio. Alrededor de ellas amarillea un montón de huesos de podridos pellejos humanos...” El nombre de las sirenas tiene raíz griega que significa cuerda, de ahí que se asocien a la música y a la posibilidad de atar a quien escuche.
Se piensa a las sirenas como pájaros de la muerte y, por lo tanto, del más allá. Se las vincula también con las musas por la capacidad de fascinación, pero también con las arpías por la destrucción. Eurípides en Helena también reitera la idea de las sirenas como acompañantes de los muertos, de ahí que se encuentran sirenas funerarias en la cerámica portando instrumentos musicales y en ocasiones, portando espejo, como símbolo de vanidad.
Las sirenas se mencionan en plural en el texto clásico de la Odisea, aunque la lotería mexicana la mencione en femenino. Las primeras representaciones las dibujaban con alas, mitad pájaros devoradores de cadáveres y mitad mujeres. En su origen son dos sirenas que cantan y tocan instrumentos. ¿Qué cantaban las sirenas? Las únicas palabras que tenemos de ellas son el canto elogioso que le hacen a Ulises. Esto lo platica en el banquete que le otorga el rey Alcinoo a su regreso.
¿Por qué después se las representa con cola de pescado y no con alas como en las primeras representaciones? Se piensa que como Ulises no cedió ante sus cantos, entonces se suicidaron y se ahogaron en el mar; de ahí surge la idea de la cola de pescado. Al lado de la narración de la Odisea se tiene la narración del enfrentamiento de las sirenas con los argonautas, narrado en Las Argonáuticas, de Apolonio de Rodas, donde se describe la historia de Jasón en busca del vellocino de oro. Éstos en el barco, llevaban a Orfeo, famoso por su voz, quien, en lugar de taparse los oídos y sujetarse al mástil, empieza a cantar oponiendo su canto al de las sirenas. Orfeo apaga el canto de las sirenas y, como consecuencia, éstas se suicidan tirándose al mar. No pueden soportar que alguien cante mejor que ellas: “desde lo alto del grisáceo escollo se pasmaron las sirenas porque el lúgubre destino de una muerte fatal les había llegado y desde la cumbre de la escarpada rota se precipitaron al fondo del estruendoso mar y se convirtieron en rocas”. Puede ser que, por ello, en lugar de representarlas como mitad aves, aparecen representadas como mitad peces y mitad mujeres.
En la Edad Media los padres de la iglesia católica, tomaron el episodio de Ulises resistiendo a las sirenas como ejemplo moral. Las sirenas pasaron a convertirse en símbolo de tentación, en tanto que Ulises se convirtió en el hombre moral que se ataba a la cruz cristiana para resistir las nuevas tentaciones de la carne y el pecado. Por ello se encuentran sirenas en los capiteles de las iglesias. Tal vez tengan dos colas porque originalmente tenían dos patas de ave. Al menos, así representaban a las sirenas-tentación-fascinación del mundo medieval.
Hoy llegan a nuestra época como anunciantes de café y símbolo de las patrullas de policía; como parte del lenguaje cotidiano, carta de la lotería y figura poética.
¿Puedes sustraerte a la fascinación de la sirena de dos colas de Starbucks? El diseñador tomó un grabado nórdico del siglo XVI de viejos libros marinos porque quería señalar que nadie puede vencer la atracción del café. El nombre de Starbuks es del primer oficial del barco Pequod, en la novela Moby Dick. Esta sirena coronada de dos colas ya no nos seduce con cantos, pero sí con el aroma del café, el azúcar de los postres, el chocolate, la crema chantilly y el gusto de encontrarnos con las amigas. Arribamos indefensas a ese océano de las nuevas tentaciones del siglo XXI.
Publicado en Nayarit Opina, Tepic, Nayarit, 28 de junio de 2021.
Socióloga, Universidad Autónoma de Nayarit, correo: lpacheco@uan.edu.mx